Con motivo del desarrollo de este plan, hemos realizado una interesantísima actividad en clase de música con la maestra Rocío Álvarez y Gracia Montes, la coordinadora del programa. Hemos construido nuestros propios caligramas expresando nuestros sentimientos hacia la música y la verdad es que entre ellos podemos apreciar verdaderas obras de arte.
¿Qué no sabes que es un caligrama? pues consiste en inventar un poema y hacer un dibujo con las letras. En este caso, hemos elegido la temática musical, ya que nos encanta la música en el cole y nos da mucho juego a la hora de crear cualquier cosa.
Os dejamos algunos bellos ejemplos de los artistas de los alumn@s de nuestro centro.
La música me hace bailar,
cuando empiezo no puedo parar,
la maestra Rocío tiene un piano
cuando lo toca me pongo a bailar.
El cajón es un instrumento de percusión,
cuando mis compañeros cantan el público se levanta
y con la última canción
termina la función.
La música es genial,
es un arte ancestral,
no es sonido normal,
es un poder especial.
Mi corazón
es igual que un robot,
cuando la música suena
acelera.
La música encanta,
la música se canta.
La música no explota,
la música se nota.
La música es buena,
la música suena.
Niño que estas en la cuna,
eres hijo de la gran luna
cancioncilla que cantas
sobre la luna
no despiertes al niño
que está en la cuna.
No despiertes al niño
que está en la cuna.
Ayer vi una cuna,
estamos tocando Hijo de la luna.
Me gusta la música
porque hay mucha acústica.
Me gusta la tuba,
me gustan los platillos,
también el tambor,
que no se te olvide
que toco el saxofón.
Me gusta la música,
no se cantar
pero practrico y practico
y no puedo parar.
La música es mi mundo,
me sale del corazón,
cuando la toco y las bailo
me mola mogollón.
En mi clase canto mucho,
en mi casa canto bien
canto mucho hasta en la ducha
no me puedo contener.
La música se canta,
la música se rompe con las maracas.
Las música respira,
la música te atrapa.
La nota sol es muy fuerte
y nunca para de arder,
pero si existe una nota
que la puede detener.
Me gusta la guitarra,
me gusta el tambor
y todo muy bien
lo toco yo.
Me encanta la música
y la hay que respetar,
más cuando cojo la flauta
nada me puede parar.
Florecen las campanas musicales
y en la fuente una nube crepuscular,
se estanca el árbol de la niebla,
deja caer sus hojas en los canónigos.
A mi me encanta tocar
el piano es mi destino,
canto, canto, bailo, bailo
nada me puede parar.
